Jane Fonda no perdió la chance de saltar a la red de contenidos en línea Netflix para protagonizar junto a Lily Tomlin Grace & Frankie, comedia con aire feminista sobre mujeres abandonadas por maridos gays.
Ambas son citadas en un elegante restaurante para compartir, lo que imaginan será, una agradable cena entre dos parejas amigas. Pero cuando llegan a los postres, Robert y Sol, interpretados por Martin Sheen y Sam Waterston, sueltan la bomba: “Hace 20 años que nos amamos en secreto y las dejamos para vivir juntos los últimos años de nuestras vidas”, declaran.
Desconcertadas, rabiosas y heridas, buscan la forma de resurgir de sus cenizas tras darse cuenta de que sus proyectos de familia, a los que dedicaron sus mejores años, no tendrán un final feliz.
Con esta serie, cuyos 13 capítulos se estrenan íntegros en todo el mundo mañana, Netflix da un paso adelante en su conquista de todos los públicos al dedicar los papeles principales a dos mujeres mayores de 70 años, algo que escasea desde hace tiempo en los programas de televisión.
“Nadie está abordando temas relacionados con las mujeres mayores, aquí está lo inusual de esta serie”, explicó Fonda en un reciente encuentro con periodistas en Los Ángeles sobre Grace & Frankie, creada por Marta Kauffman, de 77 años y responsable de la exitosa serie de culto Friends.
“Y yo quería hacer una serie sobre mujeres mayores”, precisó la ganadora de dos premios Oscar por sus actuaciones en Klute (1972) y Coming Home (1978).
En medio del mal de amores que las aqueja, Grace y Frankie se dan cuenta de que apoyarse en su amistad es la mejor manera de ir hacia adelante. “Muchas mujeres no tienen idea de lo importante que es para ellas la amistad”, aseguró Tomlin, de 75 años y nominada en 1976 a un Oscar por Nashville.
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