El sexo vende. Eso lo sabemos todos”, recuerda el actor Dominic West como preámbulo de su última serie, The Affair, el drama estadounidense que ha pillado a los telespectadores por sorpresa.
“Y cuando uno se apunta a una serie con este título tan llamativo sabe que habrá sexo y mucho”, añade antes de que su compañera de reparto, la también británica Ruth Wilson, tome la palabra.
“Lo que no sabíamos antes de leer el guión es que hay mucho más, que es una historia sobre la memoria, sobre las diferentes perspectivas, donde puede haber hasta tres visiones de una misma narración”, explica en animada conversación con El País, antes de que el actor de la serie The Wire retome la charla. “The Affair habla de lo que significa ser padre, de muerte y de duelo, de clases sociales, de la desaparición de la bucólica vida rural”, concluye.
La última palabra la tiene la creadora de la serie, Sarah Treem, cuando describe su obra como una historia con muchos niveles “recubiertos de sexo”.
Fue una de las series revelación de la temporada otoñal, un éxito por sorpresa coronado con la victoria como mejor drama y mejor actriz protagonista (Wilson) en los Globos de Oro, superando a contendientes como House of Cards o The Good Wife o las siempre favoritas Claire Danes y Julianna Margulies.
“¿Que cómo lo he conseguido? ¿Por vestir de verde?”, bromeó la actriz de 33 años con el galardón en la mano. A pesar de llevar años trabajando en el medio (los seriéfilos la conocen por dar vida a Alice de la serie Luther), sigue siendo casi una total desconocida para el gran público. West, también bromista, lo tomó como la revancha de dos grandes perdedores como ellos tras participar en grandes desastres cinematográficos como El llanero solitario, en el caso de Wilson, o en John Carter, él. Más seria, Tremm dice que el secreto del éxito es que The Affair cuenta una historia “que al público le importa”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario